viernes, 6 de junio de 2008

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EL PINCOY

(ACUARELA Y PLUMA)

Este bello personaje, posee un cuerpo de foca de color acerado brillante y de gran tamaño. Tiene en su extremidad superior, una cabeza humana. Las que lo han visto, lo describen como poseedor de un rostro masculino de formas muy bellas; ojos profundos y labios sensualmente varoniles, así como una hermosa y respingada nariz. Su cabellera se describe con ondulaciones, larga y dorada. Su cuello es grueso y las aletas y cola se ven más grandes que el de una foca normal. Algunas versiones señalan que sus aletas son largas como un brazo y que efectivamente posee manos y dedos con membranas. Es factible esta aseveración, a pesar que los escritos de los estudiosos del tema en ningún caso describen estas extremidades, pero insisto que es factible, pues se reconoce al Pincoy como adicto a la música y que el sonido producido por la flauta confeccionada del colihue (caña) es lo que más le atrae. Es posible que este ser también pueda manipular este instrumento y lo use cuando acompaña a la Pincoya en sus bailes a orilla de las playas, ya que él, hace entrar en frenesí a la Diosa del Mar cuando apostado en una roca, le canta con su melodiosa voz. Los relatos dicen que él es hermano de la Pincoya y que también es su esposo. Es posible que exista entre ellos un amor incestuoso, pero también hay versiones que dicen que se trata del mismo personaje que sufre un desdoblamiento. Pincoy y Pincoya serían lo mismo, sólo que aveces se presenta de un modo masculino y otras de femenino, pues los dos representan la fecundidad en los mares. Pero este decir no podría explicar entonces el hecho de que cuando la Pincoya baila, es él quién siempre la acompaña con sus cantos. Se cuenta que este ser mítico se siente atraído por mujeres de cuerpos voluptuosos que se adentran en el mar a "mariscar" y que cuando lo desea, concreta una conquista. Se cuentan también algunos casos en que estas uniones han provocado el nacimiento de pequeños seres idénticos al Pincoy, pero que sólo han logrado vivir unas pocas horas. El Pincoy es hijo del Millalobo. Su deber en los mares, lagos y lagunas es vigilar la normal reproducción de los seres que habitan las aguas. Su padre lo nombró administrador de sus dominios y muy en especial en el tema de la fecundidad.

1 comentarios:

Rubén Cárcamo Bourgade dijo...

Gracias por tu corrección y por permitirme conocer tu trabajo que admiraba sin conocer al autor. Este último que presenta raya en lo maravilloso.Exito.